Curiosamente, aunque seamos trescientas mujeres juntas, si no hay hombres, se puede llegar a decir que andamos “solas”. Una afirmación nada inocente, ya que se puede culpar a las mujeres por andar solas si algo les pasa. Además, Ana María Stuven muestra la enorme responsabilidad que recae en las mujeres que se ven exigidas a mantener a uno o más hijos, cuando los hombres abandonan el proyecto familiar y no se llevan responsabilidad alguna (el titular bien podría ser este último). Dos caras de la idea de "soledad".
COMO IRONIZÓ…
“Una Mujer levanta las cejas antes de murmurar, sombría, solemne, es que iban solas. La Otra protesta, no iban solas, iban acompañadas la una de la otra, y aunque hubiera sido solo una la que iba por ese camino, haciendo dedo o no haciendo nada, las piernas flacas, la falda al viento, el ombligo al aire, no tendría que haber sido violada, ella, ni violado su cuerpo”.
(Lina Meruane, Permiso de circulación, 2022)
UNA MUJER…
“¿No le da miedo viajar sola, señorita? No. Nada de miedo. Y no iba sola. Llevaba mis piernas y mis brazos y una mochila de compañía y un grueso libro de historia …”.
(Lina Meruane, ¿Viaja sola? 2022)
¿NO LE DA MIEDO…
AL CARAJO…